¡¡Visca la Beata!!!

Hacia mucho tiempo que tenía ganas de ir a ver la procesión de la Beata en Valldemossa, y por una cosa o por otra no llegaba a ir. Este año no hubo excusa, vestimos a Laia de payesita con un traje que mi madre hizo para mi hermana Margarita a los 16 meses y allá que nos fuímos.

Es cierto que le quedaba un poquito grande,Laia solo tenía aquí los 11 meses, pero lo podía llevar perfectamente. Cenamos en casa nuestros primos valldemossins y a las 21:30 nos fuímos a ver la procesión.

Nos acompaño nuestra buena amiga Eva y su hija Celia. Eva esta babas con Laia, y eso que tiene un sobrino/ahijado de la misma edad, el famoso Alvarito, pero es que Laia es mucha Laia y quien está un ratito con ella acaba enamorado y Eva ha sido esa niñera fantástica que se ha ocupado de Laia con todo su cariño cuando yo tenía otros menesteres, como ir a una fiesta de cumple.

En Valldemossa hay mucha devoción por esta santa, que es una santa mallorquina que nació y vivió alli, y decoran las calles, las casas...Si Valldemossa es de por si bonita estos días más.

Laia siguió todo la procesión alucinada, lo miraba todo maravillada y cuando los músicos pasaban tocando la canción de la beata ella aplaudía y bailoteaba.

Este es uno de los muchos carros que acompañaban a la beata, todos tirados por asnos o caballos y os aseguro que en esas calles empedradas y empinadas había momentos en que el susto era inevitable, los asnos patinaban y el carro venía hacía ti, un par de veces Eva y yo cogimos el cochecito de Laia al vuelo para salir corriendo, pero no llego la sangre al rio.

Este es el carro triunfal, ahí va la niña que representa la Beata, todos los demás son angelitos. El carro era enorme, estirado por 4 caballos y detrás del carro iban como 20 hombres con cuerdas para en las cuestas empinadas, al bajarlas, no se fuera el carro. Era impresionante verlo.

Y así quedó nuestra payesita, más dormida que un ocho y eso que la banda de xeremiers se nos paro al lado tocando la beata, entre ellos nuestro querido Xuanmi, pero ella ni se inmuto. El año que viene más, que nos gustó la experiencia.