Os lo imaginais?

Os imaginais un mundo sin la risa de los niños? Un mundo sin su alegría sincera? Os imaginais una noche de reyes sin su entusiasmo, su asombro, su ilusión? Un mundo donde no existiera esa inocencia, esas manitas regordetas, esa mirada limpia. Un mundo sin el ratoncito Perez, que no recogería los dientecillos ni dejaría su regalo a cambio. Un mundo sin las preguntas absurdas, inteligentes, maravillosas que te hacen los niños. Os imaginais realmente ese mundo? Sería un lugar triste, un lugar donde faltaría la magia, un lugar vacio... Si estas rodeado de niños inconscientemente te vuelves niño otra vez. Recuperamos por un momento las ganas de jugar, de reír con ganas, de disfrutar del momento. Que nuestra mayor preocupación fuera que el caracol que cogimos el fin de semana siga en su cajita cuando lleguemos a casa. Y que pasa si tenemos la casa sucia, o desordenada o hecha un desastre? Ya se limpiará, ya lo haremos, ahora estamos jugando, sin prisas, sin agobios, ahora somos niños otra vez!!!!