Por fin os presento oficialmente al amigo de Laia, el elefante que va adosado a ella. Este jersey se lo hizo su abuela Juana. La abuela Juana sabe que a mi no me gustan todos los jerseys hechos a mano, que soy muy selectiva, que para esas cosas soy muy mía, y por tanto no me haría nada a no ser que yo se lo pida. Pero es que este jersey tiene mucha historia y le tengo un cariño especial. La primera vez que mi madre lo hizo fue para mi, con unos 7/8 años, era extragrande y lo llevaba como vestido con leotardos y botas, que en esa época era lo más. Lo seguí empleando hasta los 10/11 años, luego ya como jersey normal. El éxito que tuvo este jersey fue arrollador, en el cole la profesora me llevo clase por clase para que me vieran las otras profesoras de lo bonito que era, y con lo tímida que era yo por esas épocas pues lo pasé fatal. A partir de ahí fue el jersey por excelencia de toda niña querida que naciese a nuestro alrededor, mi madre se lo hizo a un montón de niñas y claro, faltaría que no le hiciese uno a Laia. Además , este me gusta mucho a mi, así que le dí el visto bueno y aquí lo tengo. Le queda un poquito cortito ya, pero todavía lo podrá llevar mucho y para el año que viene ya tengo otro guardado que era de Blanca, cuando tenía dos años, así que se lo veréis puesto mucho tiempo. Lo gracioso es que cada vez que lo lleva y mira un cuento que tenemos, bueno, el que esta leyendo y sale un elefante , se señala el jersey toda sonriente. Ya lo asocia todo. Y que decir de lo que le gusta mirar cuentos? Se entretiene un montón, alucino con lo que le gusta, a ver si vamos potenciándolo y se convierte en una gran lectora como su madre.
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